CHARLY GARCÍA CELEBRA 35 AÑOS CON “PARTE DE LA RELIGIÓN”

Posted on Posted in Editorial

Por Beto Arán.

Publicado en 26 de mayo de 1987, representa un símbolo del rock latino de los 80’.

Un álbum que quedó en la historia como una producción que perfectamente pudo ser un “Grandes Éxitos”. A más de tres décadas de su publicación, sigue siendo un trabajo evolutivo, innovador y con personalidad suficiente para instalarse como un ícono en la trayectoria de un músico tan talento como irreverente. Y ese desparpajo, me fascina.

Gracias a rolas como “No voy en tren”, “Rezo por vos”, “Rap de las hormigas”, “La ruta del tentempié” y “Adela en el carrousel”, entre otras, dejo de manifiesto que la creatividad y el explorar nuevas rutas sónicas como la ha hecho a lo largo de toda su carrera, se alzaba como un pilar distintivo de una placa única e irrepetible.“Voy a cambiar. Voy a insistir. Voy a pelear. Voy a seguir”, así arranca Charly García en “Necesito tu amor”, primer tema de Parte de la religión, disco que cumple 35 años. Fue el cuarto trabajo de estudio del artista como solista.

Sin duda, fue un cierre perfecto para aquella seguidilla de excelentes trabajos de Charly García como “Yendo de la cama al living”, “Clics modernos” y “Piano Bar”.

CÓMO FUE LA GRABACIÓN DE “PARTE DE LA RELIGIÓN”

En primera etapa de trabajo en el estudio, Charly estuvo junto a al técnico Mario Breuer –quien más tarde trabajaría con La Ley- en los estudios Panda, donde el músico tocó casi todos los instrumentos, salvo la participación destacada del baterista, Fernando Samalea.

“Charly es el mejor y también el peor. Es tan creativo que puede estar varios días sin parar de tirar magia. Es muy intenso y profesional. Un trabajador muy serio y memorioso. Se acuerda de todo. Lo malo fue que terminamos borrando un montón de cosas maravillosas”, sostuvo Breuer a revista La Viola.

Y agregó: “En Parte de la religión, uno de mis discos favoritos en que trabajé, entramos a Panda y lo grabamos en 10 días, donde pasaron cosas mágicas y únicas. Un día dejaron en el estudio un disquete con unos sonidos de batería electrónica. Mi asistente me dijo que me lo había dejado una persona, pero que nos sabía su nombre. Los usamos y quedaron bárbaros”.

“Meses después vino otra persona interesada en ese sonido y cuando lo fui a ver descubrí que se había borrado. Parecería que lo había borrado Charly, pero al tiempo me lo pidió. En definitiva, no sabemos quién lo trajo ni cómo desapareció”, concluyó.

Como únicos invitados, estuvieron Fabiana Cantilo, Daniel Melingo y David Lebón, que hizo los solos de guitarra en “Buscando un símbolo de paz” y “Adela en el carrousel”. Con ese material bajo el brazo, García siguió la grabación en Río de Janeiro, en los estudios Sigla, donde llamó al grupo Os Paralamas do Sucesso que participó en la percusión en el tema “Rap de las hormigas”.

Charly sumó a Paula Toller, cantante que formó parte de la banda Kid Abelha y que tiene una conocida carrera solista, en el estribillo de “Buscando un símbolo de paz”.” Y damos vuelta a la discoteca y ya no quedan ganas de sonreír. Nos divertimos en primavera y en invierno nos queremos morir”, canta Toller.

La tercera etapa de grabación lo llevó al músico a Nueva York, donde se juntó con un viejo conocido, el técnico Joe Blaney en los legendarios estudios Electric Lady. También se sumó la cantante Cheryl Poirier (de Kid Creole and the Coconuts) en los coros de “No voy en tren” y “La ruta del tentempié”.

PUBLICIDAD DEL DISCO

 “Todo el proceso de hacerlo fue muy feliz. Empezar a grabarlo acá fue muy lindo, aún con un poco de locura capitalina. Fue recreativo. Lo de Brasil fue genial porque grabábamos día por medio; así fue que íbamos a la playa y qué sé yo. Paré un poco el nivel de la cabeza y pasamos a la frecuencia brasileña. En Nueva York siguió el placer máximo, ahí grabé casi todo de nuevo. La pasamos muy bien”, describió Charly a la revista “Rock&Pop”.

Para los shows, el ex Serú Girán armó una importante banda formada por Carlos García López en guitarras, Fernando Lupano en bajo, Alfie Martins y Fabián Quintiero en teclados, y Samalea en batería. Los coros se fueron alternando entre Fabi Cantilo, Andrea Álvarez y Gaby Aisenson. El disco cuenta con su histórica colaboración junto a Luis Alberto Spinetta. Si bien no fue la primera canción en la que fueron socios (“Total interferencia” y “Peluca telefónica”), “Rezo por vos” fue la única que nació de un proyecto en común que quedó trunco en 1985 cuando los dos artistas se embarcaron en un viaje que la incompatibilidad de caracteres terminó haciendo naufragar.

La historia es conocida. La primera vez que la tocaron juntos formalmente fue el 14 de septiembre de 1985, cuando su proyecto como socios (se llamaría Cómo conseguir chicas, nombre que después Charly usó para un disco suyo en 1989) estaba vivo. El lugar fue un estudio de televisión, en ATC, durante un programa que se llamaba “Cable a Tierra”, conducido por José “Pepe” Eliaschev.

“La indómita luz se hizo carne en mí…”. Mientras se presentaban en el programa y en el estribillo, Charly cantaba “y rompí las cortinas y me incendié de amor”, la videograbadora que en su casa grababa el programa hizo un cortocircuito y el chispazo prendió fuego el equipo electrónico, sumado a las cortinas del departamento de García y provocó un incendio que estuvo cerca de destruir todo. El teléfono del canal sonó a los pocos minutos y Charly acompañado por Spinetta, quien lo llevó en su camioneta, volvió de urgencia para su casa.

Los bomberos pudieron controlar el fuego y no hubo que lamentar más que pérdidas materiales. Zoca, la novia brasileña de García por aquel tiempo, estaba en el departamento y resultó ilesa. En las versiones que el Flaco y el exintegrante de Sui Generis grabaron tiempo después, los dos eliminaron la frase original “incendié de amor” y la reemplazaron por “encendí de amor”.

Un disco con historia que hoy te invitamos a revivir junto a nosotros.

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *