LA SALUD DEL ROCK CHILENO: UN PACIENTE EN ESTADO DE ANESTESIA

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Por Beto Arán.

Cumbre del Rock Chileno 2017

Soplan aires de incertidumbre en la escena nacional. Durante los últimos años, fuimos testigos de conflictos, disoluciones y enfermedades que afectan a los pilares creativos que desarrollaron esa inagotable sonoridad instalada en la memoria colectiva de una silenciosa facción de chilenos. Una masa dotada de generosos halagos para vanagloriar el éxito e inflexibles para criticar la adversidad personal o coyuntura artística. Sin duda, una honorable cualidad que engalana nuestra depurada idiosincrasia.

Las lecturas sobre la escena actual resultan múltiples. No obstante, el diagnóstico suele ser más sencillo. Y claro, estamos hablando de rock. El delicado estado de salud que afecta a Jorge González y Álvaro Henríquez, ahondan la necesidad de trabajar en los cimientos que dan vida a la alicaída cartelera nacional. Llegó la hora de generar un recambio de nombres, capaces de sustentar un liderazgo exportable a las nuevas generaciones.  Necesitamos abrir la puerta para ofrecer el talento al mundo.

Viejos estandartes como La Ley y Los Bunkers, son parte del baúl de los recuerdos. Mientras que en la otra vereda, proyectos como los de Weichafe, Pánico y en su instante el mismo Jorge González, canalizaron sus energías viajando al extranjero en busca de grandes mercados para difundir su trabajo. Unos antes y otros después, comprendieron los beneficios en el uso de plataformas virtuales con nuevos formatos de distribución, modalidades de venta y estrategias promocionales.

Tendencia unida a la escasa cobertura de los medios chilenos en torno a la escena nacional. Nada de extraño, comprendiendo que hoy vivimos en la sociedad de la inmediatez, donde el éxito es el único camino hacia el reconocimiento. Sino, pregúntele a Mon Laferte. Una cantante que hoy goza del éxito en el imponente mercado azteca, mientras que en su país cosechó la indiferencia del jurado televisivo en aquél programa de TVN que la vio nacer. Y claro está, nadie es profeta en su tierra.

En el circuito punk, heavy o metal extremo sobran las bandas. Sin embargo, las masivas convocatorias, auspiciosos lanzamientos y reconocimiento internacional es privilegio de muy pocos. Sin duda, Fiskales Ad Hok, representa una isla dentro del universo que abraza el anonimato mediático. Una difusión que sólo se ve alterada por la gestión de fanáticos asociados a la organización de eventos, publicaciones independientes y centros culturales. Por cierto, sin fines de lucro.

A raíz del particular escenario, cobra mayor fuerza el legado impuesto por el ex Prisionero y el líder de Los Tres. Y es que Jorge González y Álvaro Henríquez, provienen de la última camada del rock nacional que tuvo en sus composiciones el sustento artístico para atraer a los medios, llenar estadios y hacer de su música un arte de exportación. Su abrupta salida de los escenarios, abre un espacio para que otros géneros como el pop, electrónica y el formato de canción asociado a propuestas como la de Manuel García, Nano Stern, Gepe y Camila Moreno, por citar algunos, acaparen un nicho que hoy parece huérfano y sin capacidad de reacción.

Wiechafe, hoy radicados en México.

Quizás el reciente fenómeno de Kuervos del Sur, unido a los ya consagrados Chancho en Piedra,  Weichafe y Fiskales Ad Hok, asoman como una valiente excepción a la regla. Actualmente, evocar la premisa que todo tiempo pasado fue mejor sería majadero y autocomplaciente. Sólo resta dar herramientas para generar la ebullición  de esa catarsis que trae consigo el rock. Un acto de indisciplina que convirtió a González y Henríquez, en dos tipos líderes de generación dejando un vacío musical que aún no se logra constelar.

3 thoughts on “LA SALUD DEL ROCK CHILENO: UN PACIENTE EN ESTADO DE ANESTESIA

  1. Tal como dices en tu nota, existen una gran cantidad de bandas de variados estilos como metal (y todas sus derivaciones), punk, indie, alternativo y pop .. pero lamentablemente muy pocas bandas son capaces de llevar público, y las pocas que lo logran deben tener trabajos alternativos para ganarse el pan de cada día. Destaco tu medio Los90.cl entre pocos, que si dan cabida a bandas y festivales mas under ¡

  2. Sin duda está en suspenso…ya no hay rebeldía sólo adaptación al mercado. Lo mejor en estos momentos: bandas ee sellos alternativos.

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